Valoracion de maquinaria
El activo fijo, la maquinaria e instalaciones de una empresa constituyen en muchos casos una parte fundamental de su proceso productivo y requieren importantes inversiones de capital. Por todo ello, es muy frecuente y necesario conocer el valor de dichos activos para realizar un balance adecuado o para la toma de decisiones con respecto a:
- Capital asegurable en la suscripción o renovación de pólizas de seguro.
- Operaciones vinculadas de compra-venta de activos que requieren justificación de valor.
- Operaciones de garantía mobiliaria o aval.
- Regulación de patrimonio de empresas
- Inventarios o conciliaciones contables
- Asignación de precio pagado (PPA) en transacciones de precio único que requieren asignación de valor contable individualizado.
La valoración de este tipo de activos incluye maquinaria, instalaciones, equipos, utillaje, herramientas, mobiliario o vehículos, y debe considerar aspectos tan importantes como la polivalencia del activo o su uso específico en un proceso productivo concreto, así como la consideración de una hipótesis de uso continuado o de liquidación.
Tasación de maquinaria con el método de Coste
El proceso de valoración empleado para la determinación del valor de liquidación ordenada se basa en el método del coste.
El coste de reposición a nuevo es el coste requerido para reemplazar una máquina por otra nueva moderna, que utilice la tecnología y materiales más actuales, reproduciendo la capacidad y utilidad de la maquinaria existente.
De acuerdo con este método de valoración, se estima el costo de reposición a nuevo de los bienes objeto del estudio, consistente en valorar las modificaciones necesarias para que cumpla su función, este método no siempre es viable.
El valor de tasación será la diferencia del precio actual de la máquina menos el coste de su adaptación.
Para utilizar este método se dispone de una base de datos de maquinaria actualizada periódicamente que es consultada en cada caso.
Tasación de maquinaria con el método de la depreciación
Este método de valoración se basa en la depreciación que sufre un bien por causa del desgaste que le ocasiona el uso y por la falta de competitividad que experimenta al salir al mercado otro similar en producción, con más funciones y/o más capacidad.
La depreciación física es la pérdida de valor causada por el deterioro físico resultante del uso y desgaste de un bien, estando sometido a un proceso de producción y expuesto a elementos externos.
La depreciación por tiempo es la pérdida de valor que experimenta un bien por el transcurso del tiempo y el aumento de su obsolescencia.
Para la aplicación de este método al precio de compra en su día se le aplica un porcentaje depreciatorio por el uso que lo establece el perito en función del estado del bien a tasar y de su buen funcionamiento en un tramo de 0 a 70 donde 0 es perfecto estado de mantenimiento y funcionamiento y 70 no funciona.
El otro porcentaje depreciatorio se aplica por el tiempo, que depende de la tendencia del mercado y de las modificaciones de funciones que tiene el bien a tasar, este porcentaje varía de 0 a 30.
En el caso de que la suma de los anteriores sea superior al 100%, se toma el valor que pueda tener como chatarra al peso y en este caso se calcula su peso al precio de chatarra y no se aplica el porcentaje depreciatorio.